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Foto por Cristóbal |
Hace tiempo, yo me ponía una meta, algo simple como terminar un proyecto. A veces la cumplía, otras no. Me sentía horrible cuando no lo hacía. Y cuando si lo hacía, me ponía otro objetivo. Pero realmente no me sentía tan bien, no disfrutaba siempre de lo que hacía. En libros, artículos y demás siempre están esas metas. Que debes de imponerte metas para avanzar en la vida, que debes de esforzarte por cumplirlas. Pero no siempre disfrutas intentado cumplir ese sueño.
Un día, decidí simplemente dejar de imponerme metas, tirar todo eso. Este sistema que parece universal no me estaba funcionando. Dejé de tener metas, objetivos y sueños. ¿Y ahora que hago? Trabajo en lo que me apasiona.
'Las metas, los objetivos funcionan así: Nos decimos a nosotros mismos que no nos sentimos felices por que no hemos cumplido esa meta, trabajamos por ella sintiéndonos infelices y viendo al futuro, imaginando como nos vamos a sentir cuando al fin termine todo esto. Cuando cumples tu meta, te sientes feliz, pero por un ínfimo instante por que después de eso hay otras metas: Más infelicidad'.
Este es un fragmento de mi nuevo articulo en PDF 'No todos son felices trabajando por objetivos'.
Porque se que existe otra forma de hacer las cosas. Al deshacerte de tus metas no quiere decir que te vas a dedicar a hacer nada o dormir todo el día. No. Haz como yo, todos los días me levanto de la cama y pienso '¿Qué tengo ganas de hacer hoy?' y lo hago.
Simplemente, trabajo en lo que me apasiona.
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