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Foto por Cristóbal |
El hecho de aprender algo nuevo cada día no solo aumenta el acervo, también nos permite mantener las neuronas activas y esquivar la rutina. El problema son los hábitos, no todos estamos acostumbrados a ser autodidactas además de que muchos suelen empezar algo para no terminarlo.
Personalmente, lo que hago es simplemente iniciar un curso o proyecto y avanzar todos los días. Todos y cada uno de ellos, no importa que un día avance poco y al siguiente invierta horas y horas haciendo o aprendiendo ese 'algo nuevo', lo único que importa es avanzar cada día. Al poco uno se hace el hábito y, como es algo divertido y que yo mismo escogí, cada mañana me levanto con ganas de trabajar en ese algo o aprender un poco más.
Inicia un curso online gratuito o investiga por tu cuenta.
Las maravillas de Internet, aparte de contener una cantidad incalculable de material para reírse por horas también es un receptáculo donde convergen proyectos y conocimientos del mundo. Hay mucho contenido didáctico repartido por todo Internet. Si quieres aprender algo nuevo, echa un vistazo a sitios y servicios como Open University, iTunes U, Coursera y páginas de universidades que todos conocemos (Oxford, MIT, etcétera) a veces contienen material libremente accesible. Ahí hay montones de cursos y recopilaciones de toda clase de temas, desde psicología, sociología hasta programación, arte y matemáticas. No solo eso, puedes aprender a usar algo nuevo, como tocar un instrumento o manejar software especializado.
Toma tus mejores herramientas y empieza un proyecto manual.
La mejor forma de aprender es haciendo. Desde tallar algo en madera hasta levantar una pared tu mismo. No importa que no hayas hecho nada de eso antes y realmente no tengas idea de como empezar. Para eso está Internet, puedes investigar proyectos relacionados y aprender de ellos. Si te gusta hacer cosas con tus manos, puedes inclinarte a las llamados proyectos DIY ('Do it yourself'), en páginas como instructables.com hay miles de proyectos para toda clase de personas.
Mantente despierto con pequeños detalles.
Si te despierta más la curiosidad fugaz, puedes aprender algo nuevo cada día sin necesidad de empezar un proyecto o meterte de lleno a un curso. Tan solo apóyate en medios de divulgación científica. Puedes leer revistas especializadas, libros técnicos o, de nuevo, buscar en Internet en páginas como TED, que está repleto de ponencias inspiradoras.
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